Bocetos originales de Lucho Olivera
Bueno, no entiendo cómo funciona.
Les pido que traten de ver las imágenes haciendo click en los link.
Si no aparecen las imágenes, avísenme. Y (¡por favor!) explíquenme cómo se hace.
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Hace unos días encontré unos bocetos originales de Lucho Olivera a los que creía perdidos. Fue una gran felicidad encontrarlos y quería compartirlo con alguien que supiera valorarlos. Por eso pensé en ustedes, que aman a la historieta y seguramente, también, a muchos trabajos surgidos del talento de Olivera.
La historia es la siguiente:
Ediciones Record, la Editorial de Alfredo Scutti que publicaba la Skorpio argentina, cambió muchas veces de oficinas. Uno de los edificios que ocupó tenía un bar en la planta baja, tan pequeño que apenas entraban 2 mesas con 4 sillas cada una. Allí solíamos reunirnos dibujantes y guionistas cuando nos encontrábamos en la Editorial, por lo general los viernes por la tarde. Justamente en Ediciones Record yo había conocido a Lucho, a comienzos de 89’, un par de meses antes.
En medio de una conversación que manteníamos un grupo de colegas, Lucho saca una hoja y empieza a bocetar una idea. El resultado final es una máscara gigante, con unos hombres parados sobre la frente o metiéndose por uno de sus ojos. Al que completó, en el revés de la hoja, con un plano más cercano de un detalle del dibujo anterior. Me lo entrega y me dice “A ver si se te ocurre alguna historia con esto”.
Pasé el viaje de regreso mirando el dibujo (yo volvía en tren y no tenía que conducir), y se me ocurrieron varias historias (el dibujo de Lucho siempre me resultó muy inspirador). Finalmente elegí la que habría de transformarse en “Las máscaras del rey”, una fantasía en la que un rey de un tiempo lejano había construido 4 máscaras gigantes, en cada una de las cuales existía un misterio a revelar. Fue el comienzo de una larga producción en conjunto de unitarios y miniseries, que se mantuvo por años.
Yo le doy un gran valor a cosas como esta. Pero, al mismo tiempo, suelo ser desordenado y distraído. He perdido una serie de bocetos de Jorge Zaffino, que él dibujó mientras armábamos una serie ambientada en Buenos Aires, que después nunca se hizo. He perdido, incluso, algunos bocetos de Quique Alcatena, dibujados en servilletas de papel, mientras conversábamos en algún bar sobre las características que podían tener los personajes de alguna serie. Y he perdido muchas otras cosas que, por únicas y significativas considero muy valiosas. Por eso, me alegró tanto recuperar estos bocetos. Y quise compartirlo con quienes, también, pueden valorarlo.
Le envío mi afecto.